Bienvenidos.
Desde que ya en la prehistoria el ser humano se dio cuenta de que ciertas bebidas les embriagaban (en el más literal de los sentidos) comenzó a utilizarlas para su recreo, y en muchas ocasiones, para su vida espirtual (tantas veces unidas...): desde tiempos remotos, el consumo de alcohol ha sido una constante, más o menos perniciosa, pero siempre generadora de anécdotas, y como no, de cultura.
Este es otro blog temático en el que se tratará el tema de la bebida y de sus consumidores (alcohólicos o no), de sus vendedores y sus lugares (bares, restaurantes, cafés, cabarets, tascas, lo que ustedes prefieran...), de sus recetas y de sus efectos (sanitarios, culturales, económicos.)
Existen algo que se ha llamado a veces "baja cultura", esa que supuestamente toca las capas más bajas de la sociedad: de esta salieron cosas tan dignas como el jazz o las novelas pulp, hoy elevadas a los grados más altos de sofisticación. Precisamente, una de las paradojas de la modernidad es el haber elevado la baja cultura a los alta cultura, pero no creo que estos dos elitistas términos sean necesariamente contradictorios.
¿Qué era el conde Henri de Tolouse-Lautrec, un alcohólico putero o un genio de las bellas artes? ¿No podía ser simplemente las dos cosas, igual que Dioniso era un poderosísimo Dios, o que incluso la sangre del propio Cristo se simbolizaba con vino?
¿Generalización? ¿Normalización? Llamenlo como quieran. Este blog no pretende incitar al alcoholismo, sino recordar que los vicios, más o menos sanos, son también parte, y una de las más importantes, de la historia y de las artes; si en algún momento queremos comprender a los hombres del pasado, habremos de intentar conocer sus hábitos y no solo los buenos: sus costumbres al divertirse, sus costumbres sexuales, sus costumbres lúdico-alimentarias...
Y de todo eso, hablaremos aquí.
A su salud.
Bien por tu nuevo blog, distinto y distinguido. De la sicalipsis a la bebida hay pocos pasos, y en este blog se reducen a uno sólo, además muy entretenido. En tiempos como estos, auténticas travesías del desierto, beber es necesario. Te sigo.
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